lunes, 13 de julio de 2009

FE DE ERRATAS

Por una error de compaginación la nota sobre el 27 de febrero aparece desordenada, primero debe leerse donde aparece el título 27 de febrero resaltado, inmediatamente después ver las fotos y leer las notas y comentarios sobre las fotos.
Por su atención MUCHAS GRACIAS




































En el caso de la escultura ecuestre:

1.- La frase en la placa de “Batalla del 27 de febrero de 1864” es falsa ya que nunca existió tal evento, ese día los intervencionistas se fueron en “El Guaraguao”, nunca hubo un enfrentamiento de ejércitos; entonces la palabra “Batalla” no funciona como en el anterior ejemplo “Batalla del Jahuactal”.

2.- Gregorio Méndez no usaba uniforme militar, sino ropa civil (camisola sin cuello y pantalón, ambos de manta) ya que no era coronel del ejército regular, era de la Guardia Nacional y fue nombrado así por el Gobernador Felipe de Jesús Serra pasada la guerra de intervención. “…En el libro ANTÓN PÉREZ, de Manuel Sánchez Mármol, aparece una visión más exacta de lo que fueron las fuerzas mal vestida y mal apertrechadas de Méndez y Magallanes…”. Por otro lado el sable que empuña nunca existió, fue verdaderamente compositivo o decorativo.







3.- Durante los siglos XVIII y XIX no hubieron en Tabasco caballos purasangre, solo los llamados “criollos”.

4.- Gregorio Méndez usaba botines de cuero con espuelas de estrella como los jinetes tabasqueños de la época y no las botas militares con acicates* como se le representa.
*Espuela con una sola punta para montar a la jineta, usado por la caballería en el siglo XIX.

5.- Al estado de Tabasco nunca llegaron los soldados zuavos (soldado del cuerpo francés de infantería destacada en el norte de África en la época colonial), mismos que fueron traídos especialmente para la batalla del “5 de mayo de 1862” en Puebla, únicamente.

Existe una leyenda urbana la cual dice que el Gobierno de Francia ha pedido corregir el error, eliminándose al soldado zuavo arrodillado y a cambio ellos entregarían unas banderas mexicanas ganadas en batalla. Esto es falso, ya que ningún gobierno cambia trofeos de guerra por un hecho ficticio que solo deja en claro la ignorancia de un pueblo.

6.- Sexto, en lugar de albardón*, que el coronel Méndez usaba para montar, se le coloca una silla con manzana.
*Silla de montar de herencia española, con los bordes de delate y de detrás muy salientes.

7.- Según los conceptos clásicos de la escultura ecuestre: si el caballo tiene dos patas levantadas el personaje murió en combate, si es solo una el jinete murió a causa de una herida en combate; pero si está parado en cuatro patas, el jinete murió a causa de otra cosa (de vejez o de alguna enfermedad). En el caso que nos atañe, el caballo tiene dos patas levantadas, pero no es cierto, el coronel Gregorio Méndez murió en la tranquilidad de su hogar en 1887 (aún en nuestros días no existe una biografía exacta sobre el Coronel Gregorio Méndez Magaña)

La escultura fue encargada por el Gobernador Carlos Madrazo Becerra al Augusto Escobedo (Augusto Ortega Escobedo, Cd. De México 1914 – Edo. De Morelos 1995), mismo que en la década de los ochenta durante una conferencia en la galería “El Jaguar Despertado” respondiendo a una pregunta sobre por que de tantas inexactitudes, dijo: “Me basé en las instrucciones precisas del entonces gobernador del estado…”

En un retrato elaborado entre el 2002 y 2004 y que se ubica en una sala de exposiciones de reciente creación en el Palacio de Gobierno se puede apreciar al corl. Gregorio Méndez uniformado como nunca lo estuvo, creándose una falsa imagen del prócer.

La historia ha continuado de generación en generación hasta que en la actualidad según datos encontrados en una encuesta sobre cultura realizada en el 2004 para una tesina sobre “Los museos en Tabasco” elaborada por un servidor, arrojo las siguientes cifras:

El 80% de la población, no sabe con precisión que fue lo que pasó el día 27 de febrero de 1864
El 16% cree que fue “La batalla del Jahuactal” (pero tampoco sabe donde es el lugar con exactitud)
El 8% es el nombre de un estadio de base-ball
El 4% restante si lo sabe pero considera que fue una batalla.

Ahora ha llegado el momento de colocar las cosas en su justa dimensión aunque y tengamos que hacer una reflexión, nos beneficia mostrar la verdad objetiva o dejar pasar un hecho faccioso que por momentos parece no interesarle a nadie. Será la historia quien nos juzgue y el pueblo quien nos demande.

“Cada lugar tiene dos historias, la oficial y la verídica”
Autor anónimo

EL 27 DE FEBRERO




27 de febrero
¿Qué es lo que se celebra?
“Aquellos que no estudian su historia, están condenados a repetirla”
Autor anónimo.

El día 27 de febrero se celebra en Tabasco la salida en 1864, del ejercito intervencionista (formado por filibusteros: Haitianos, Dominicanos y Cubanos) capitaneados por el ambicioso mercenario de origen español Eduardo González Arévalo. Cabe puntualizar que un día antes de su salida en el buque de guerra “Conservador” conocido en estos rumbos como “El guaraguao” el ejercito cambió de mando por el general Manuel Díaz de la Vega.

Según escribe el historiador Jorge Priego Martínez, “Los colorados, como también se les llamó, fueron acosados diariamente por las fuerzas al mando del coronel Gregorio Méndez Magaña, obligándolos a replegarse a una trinchera abierta a lo largo de la hoy avenida Madero, con el río Grijalva a las espaldas…”, no se soltó un solo tiro en la revuelta debido a que los invasores pactaron una tregua con la finalidad de poder abandonar el lugar con amanecer, las fuerzas de Méndez fueron tomando de manera ordenada las posiciones que el enemigo fue abandonando. Este hecho ha sido tergiversado por historiadores de pacotilla que confundiendo las fechas situaron este evento como la “Batalla del Jahuactal” que se llevó a cabo en Cunduacán el 01 de noviembre de 1863.
Nota.- En una batalla los ejércitos se enfrentan en un lugar específico, la “Batalla del Jahuactal” al no encontrarse considerada dentro de las batallas de La Segunda Intervención Francesa en México”, hace suponer de que se trató tal vez de una “escaramuza” –contienda de poca importancia entre avanzadilla de los ejércitos-.

Desafortunadamente para todos nosotros durante la década de los años cincuenta se llevaron a cabo una serie de “simulacros de la gesta de febrero de 1864” en las que se presentaba un ejército bien uniformado luchando contra soldados zuavos en las calles de Villahermosa. Este hecho hizo que la población recreara en su mente una serie de sucesos que nunca sucedieron.

En este sentido fue más importante la toma del fuerte “El principal” (ubicado donde hoy se encuentra el edificio Anexo al Palacio de Gobierno), hecho de armas en la que se distinguió el coronel Eusebio Castillo y sus hombres al mando que a sangre fuego tomaron el fuerte el día 11 de febrero; es preciso mencionar que todo el tiempo existió una desventaja numérica y de armas pero el resultado fue lo que obligó a los intervencionistas a salir de San Juan Bautista varios días después.

Por si las cosas no estuvieran mal a continuación presento una serie de inexactitudes que contiene la escultura ecuestre del coronel Gregorio Méndez, conocido como “El Caballito”, según Priego Martínez: “Primera, en la base del monumento hay una leyenda que textual, pero mentirosamente dice: “Batalla del 27 de Febrero de 1864”. Segunda, el coronel Méndez aparece luciendo uniforme de coronel de las fuerzas nacionales, es decir, del ejército mexicano, al que entonces no pertenecía. Tercera, el coronel Méndez monta un caballo pura sangre. Cuarta, El coronel no lleva espuelas sino acicates. Quinta, Méndez aparece arrollando a un zuavo, miembro de las fuerzas mercenarias del norte de África, si no nos equivocamos, que peleaban al lado de los franceses intervencionistas. Sexta, usa como silla de montar un albardón…”. Una séptima que se le escapó al Maestro fue la de que el monumento no sigue los cánones clásicos de la escultura ecuestre, pareciera que el escultor ni siquiera los conocía.

A lo anteriormente afirmado agrego algunos aspectos más para explicaremos por qué resultan falsos los elementos que forman este monumento y el retrato ubicado en el interior del Palacio de Gobierno; que a continuación enumero: